ALMA, BENDICE AL SEÑOR
HIMNO:ALMA, BENDICE AL SEÑOR AUTOR: JOACHIM NEANDER Alma, bendice al Señor, Rey potente de gloria! De sus mercedes esté‚ viva en ti la memoria. Oh, despertad arpa y salterio! Entonad himnos de honor y victoria! Alma, bendice al Señor, que los orbes gobierna y que en sus alas te lleva cual águila tierna. El te guardó como mejor le agradó: No ves su mano paterna? Alma, bendice al Señor, de tu vida la fuente, que te creó y en salud te sostiene clemente. Tu defensor en todo trance y dolor. Su diestra es omnipotente! Alma, bendice al Señor, que prospera tu estado y beneficios sin fin sobre ti ha derramado. Piensa que es El rico, potente y muy fiel, como mil pruebas te ha dado. Alma, ¡bendice al Señor y su amor infinito! Con todo el pueblo de Dios su alabanza repito: Dios, mi salud, de todo bien plenitud, seas por siempre bendito! El himno Alma mía bendice al Señor fue escrito por Joachim Neander durante el último año de su vida, cuando tenía treinta años. Nació en 1650 en Bremen Alemania, como estudiante en Bremen, Joachim Neander vivió una vida sin Dios. Luego, cuando tenía veinte años finalizando sus estudios, Neander tuvo una verdadera conversión escuchando la palabra de Dios por un predicador llamado Undereyck llegado a Bremen, quién introdujo la enseñanza bíblica para niños y jóvenes, y aún para la servidumbre y demás personas de la clase social más baja. Neander cambió su vida totalmente sintiendo a este hombre piadoso, como su padre espiritual. En 1674 se convirtió en director de una escuela en Düsseldorf, y durante este tiempo escribió más de sesenta himnos. Debido a sus fuertes puntos de vista cristianos y sus actividades de evangelización, que disgustó a las autoridades, se retiró al final de su cargo. A pesar de las tensiones, escribió muchas canciones de alabanza. A menudo se paseaba por los valles y las colinas cerca de Dusseldorf, en comunión con su Señor. En 1679 Neander aceptó gustoso el llamado de Undereyck para ser pastor auxiliar en Bremen. En Pentecostés del año siguiente, el 31 de Mayo de 1680, falleció en Bremen, con solo 30 años, dejando tras si un legado de alabanza a Dios No se había casado, y aún no había sido ordenado pastor, tampoco se sabe si llego a ver su libro recien editado, que contenían sus canciones y poesías, la mayor parte de ellas compuestas en Dusseldorf. Fue muy grande el interés en los cantos de Joachim Neander: ya en 1716 habían sido editadas seis ediciones de su libro de cantos. El más reconocido de ellos es:” Alma mía bendice al Señor” que se atiene estrictamente a los salmos, pero no a uno solo, sino que de diversos salmos recoge las partes adecuadas para el himno. El himno ha llegado a conocerse mundialmente Aunque el himno fue traducido al inglés por Cacerine Winkworth, es mucho más problable que el misionero alemán en España, Fritz Flidner lo haya traducido directamente de los versos de Neander. “Bendice, alma mía, a Jehová, Y bendiga todo mi ser su santo nombre. Bendice, alma mía, a Jehová, Y no olvides ninguno de sus beneficios.”