Nadie pudo amarme como Cristo
HIMNO: Nadie pudo amarme como Cristo AUTOR: Charles Frederick Weigle HISTORIA DETRÁS DEL HIMNO Charles Frederick Weigle nació el 20 de noviembre de 1871 en LaFayette, Indiana, en la familia de un panadero alemán luterano y su esposa temerosos de Dios, quienes tuvieron 12 hijos El joven Charles se acostumbró a escuchar a su padre orar, y cada mañana antes del desayuno, se procedía a la lectura de la Biblia durante el culto familiar. Cuando Charles Weigle tenía doce años, la Iglesia Metodista Lafayette celebró una serie de reuniones de avivamiento. Un gran número de sus amigos y compañeros de juego se convencieron y lideraron el camino durante las reuniones. Esto dejó una fuerte impresión en el joven Charles. Aunque resistió más que la mayoría de los demás, una noche una fuerte conciencia de que estaba perdido lo invadió y Charles se convirtió. A medida que crecía, su profundo interés en la música lo llevó a asistir al Conservatorio de Música de Cincinnati, donde recibió capacitación que luego lo ayudó en su ministerio. Charles, siguió una carrera en predicación y composición de canciones demostrando un gran talento, escribiendo más de 1,000 melodías. El himnno: NADIE PUDO AMARME COMO CRISTO, lo escribió en un momento muy difícil de su vida. Él fue un evangelista muy activo, siempre trabajando para el Señor. Un día cuando regresó de una cruzada evangelística, encontró una nota que le dejó su esposa de muchos años. La nota decía que ya había tenido bastante de una vida evangelística y que se iba para no regresar. Él contaba que había sufrido tanto después del abandono de su esposa, que pensó no poder soportarlo. El historiador Kenneth W. Osbeck, autor del libro Amazing Grace , escribe que en los años siguientes Charles Weigle se sintió tan desanimado que incluso pensó en suicidarse. Llegó a preguntarse si alguien realmente se preocupaba por él, pero después de un tiempo su fe fue restaurada y se sintió nuevamente activo en la causa de Dios. Al fin triunfó la fe y escribió este precioso himno: NADIE PUDO AMARME COMO CRISTO que fue el resumen de su trágica experiencia. De un corazón roto nació un hermoso testimonio que ha servido de consuelo a muchas almas. Si estás en un momento difícil de tu vida, pide la ayuda de Dios, y toma la determinación firme de levantarte por encima de los problemas y los dolores y El Señor hará que todo se torne en bendición para ti. Reafirma tu confianza en el amor de un Dios que tiene cuidado de sus criaturas y une tu voz al coro de los fieles para entonar esta maravillosa verdad: ¡Nadie pudo amarme como Cristo! Yo quisiera hablarte del amor de Cristo, Pues en El hallé un amigo fuerte y fiel. Por su gracia transformó mi vida entera Lo que en esta vida soy lo debo a El. Nadie pudo amarme como Cristo, Es incomparable Su amistad. Sólo El pudo redimirme del pecado Por Su amor y Su bondad. Mi alma estaba llena de ayes y tristezas Llena estaba de miserias y dolor Con ternura Cristo me tendió la mano Y me guió por el sendero del amor. Cada día viene a darme nuevo aliento A mi corazón infunde dulce paz. No comprenderé por qué El vino a salvarme Hasta que en el cielo pueda ver Su faz. Palabras que nos resultan familiares porque es un himno muy conocido, que nos lleva a reflexionar acerca de la grandeza del amor de Dios. Un amor que la mente humana no puede comprender porque “excede todo conocimiento”. Un amor que la muerte no pudo extinguir, sino que brilló con resplandores eternos en la resurrección. Un amor que no cesará hasta que todos los salvados lleguemos seguros a la Sión celestial. Nada de esta vida terrenal nos causa mayor gozo ni más grande y puro regocijo, que el recuerdo de ese insondable amor. Pasó los últimos 15 años de su vida en las Escuelas del Templo de Tennessee en Chattanooga. Sus obras incluyen: • Cantos de paz, pureza y poder Nº2 • Himnos del Gran Tabernáculo , • Canciones de la verdadera vida • Canciones sobre Jesús Y entre sus himnos podemos destacar: –Lo que pienso de mi maestro –Amo caminar con Jesús –Llévame más alto –Viviendo para Jesús
